"Divina Comedia"
LA DIVINA COMEDIA
Contexto histórico
La Edad Media se ubica cronológicamente entre los siglos
V y XV. Se distinguen en ella dos períodos: la Alta Edad Media (siglos V A X) y
la Baja Edad Media (siglos X a XV). Tradicionalmente ha sido vista como una edad
oscura, de regresión y pérdida de valores clásicos. El esquema aceptado durante
mucho tiempo consistió en afirmar que la época
posterior a la caída del Imperio Romano de Occidente (hecho que,
convencionalmente se ha aceptado como el inicio de este momento histórico), se
caracterizó por manifestaciones artísticas de escaso valor. Luego habría
llegado un momento en que Europa recuperó su fuerza creadora y
“renacieron” las actividades
intelectuales y artísticas. Comienza entonces con el Renacimiento, la Época
Moderna. De esa ubicación entre dos períodos “brillantes”, nació la
subestimación de la era medieval.
Época de unidad y diversidad
La cultura del medioevo entonces, tiene componentes muy
diversos, aunque también posee otros que le otorgan unidad.
Pensemos, en principio en una diversidad geográfica
porque el nivel no fue el mismo en todo Occidente, y las variaciones locales se
dieron en todas las manifestaciones culturales, contribuyendo a formar la base
de las tradiciones de cada uno de los estados nacionales que se perfilan a fines de la Edad Media.
Existe también una diversidad específica
porque en cada terreno de la actividad cultural, se aprecian diferencias.
Finalmente se puede hablar de una diversidad temporal,
ya que a lo largo de los mil años que abarca
esta etapa, se produjo un cambio lento pero cierto. La lentitud del
cambio se explica si tenemos en cuenta que la fuerza de la autoridad y la
tradición, actuaban como un obstáculo al cambio rápido.
Por otro lado el elemento que dotó de mayor unidad a la
época, fue la Iglesia Católica, dada la importancia que tenía en la vida de las
personas. Su peso sobre la vida cultural
fue enorme, porque lo fue sobre la vida entera de la comunidad
occidental. No debemos pensar que los sentimientos religiosos de aquellos
hombres fueran mayores que en otras épocas, sucede que no se conocía el
ateísmo. Las personas eran, en general cristianas, porque habían nacido
cristianas y no se conocía otra forma de vida religiosa. Se sentían
estrechamente ligados a su comunidad y en ella la Iglesia estaba presente,
marcando todos los acontecimientos de sus vidas. No existía una distinción
clara entre Iglesia y Estado o vida civil y vida religiosa, lo que derivó en
una gran influencia sobre la moral pública y privada. Es por ello que se habla
del teocentrismo como nota fundamental de la época, Dios era el
centro y la medida de todas las cosas.
La sociedad medieval
Recordemos además, que la sociedad estaba fuertemente
estratificada: nobleza, clero y estado llano. Los primeros se dedicaban a las
actividades bélicas mientras que los últimos eran los campesinos que labraban
la tierra, Recién sobre el siglo XI comenzará a formarse la burguesía como
clase. El conocimiento queda reservado entonces al clero. Eran los clérigos (sacerdotes,
monjes) los educadores, conservadores de la cultura, creadores. Esto explica la
imposición de temas religiosos en la mayor parte de la era medieval ya que, a
partir del siglo XIII, el arte comienza
a incorporar otras temáticas, ligadas al público burgués.
Finalmente en los siglos XIV y XV la estructura típica
del medioevo entra en crisis: se derrumba la organización feudal y en medio de
los problemas se afirma la economía urbana; surge el capitalismo como sistema
económico; se desarrollan los estados nacionales y se afianza la autoridad
absoluta de los reyes en detrimento de la de la Iglesia. Comienza la
preocupación por la vida terrena, la muerte y la salvación; se debilita el
interés en los asuntos teológicos; surgen los precursores del Humanismo y el
ambiente se prepara para lo que será el Renacimiento.
CONTEXTUALIZACIÓN
La Divina Comedia (o La “Comedia” como se denominó
originalmente) fue escrita en la Edad Media.
EL ARTE EN LA EDAD MEDIA
La pintura
El arte
pictórico, al igual que las demás manifestaciones artísticas tenían como temas
principales los de tipo religioso, cristiano. Se buscaba plasmar una belleza
sensible dada por las formas, colores, composición, etc., y otra belleza
invisible dada por el simbolismo. El arte se entendía como abstracción y
manifestación de belleza divina, donde los rasgos no están del todo definidos,
no haciéndose semejantes a la realidad sino una esquematización de ésta
presentada como símbolo. Estaba basada en formas geométricas, se observa un
marcado geometrismo y esquematización, lo que contrastaba con la herencia de la
Antigüedad clásica. Las composiciones no son realistas, carecen de
proporcionalidad y perspectiva.
La arquitectura
La arquitectura de la baja Edad Media (siglos XI-XV)
desarrolló dos estilos, llamados Románico y Gótico, que simbolizan momentos
diferentes en el desarrollo de la sociedad medieval, coincidiendo
respectivamente con el fenómeno del feudalismo y con el nacimiento de las
ciudades y la vida urbana.
El Románico
El estilo románico, que florece entre los siglos XI y
XIII, produce edificios macizos y en penumbra, de gruesos y pesados muros, sin
apenas orificios que permitan la entrada de luz exterior, arcos de medio punto
y escasa elevación. Esta arquitectura era la expresión de una sociedad de
fuertes creencias y muy inclinada al aislamiento y a la contemplación. Las
peregrinaciones religiosas contribuyeron notablemente a la internacionalización
del arte románico. En torno a las rutas de peregrinos se levantaron algunos de
sus principales templos y monasterios. Buen ejemplo de ello son los que se
levantan a lo largo del Camino de Santiago: San Isidoro en León, San Martín de
Frómista y la propia catedral de Compostela.
El Gótico
El arte gótico surgió en Francia y se desarrolló entre
los siglos XII al XVI. Refleja una actitud espiritual y un gusto completamente
distintos. El ansia de elevación y luz, el horror a lo macizo caracterizan a
este estilo. Torres de flechas que se elevan hasta lo más alto, arcos apuntados
en ojiva que semejan dos manos unidas en oración y amplísimos vanos con
vidrieras que representan lo opuesto a las minúsculas ventanas románicas, a
veces simples saeteras, son características de este estilo.
Si la obra representativa del románico es el monasterio,
el edificio donde el gótico alcanza su expresión más plena es la catedral, que
se levanta en el centro de la gran ciudad, y cuya altura y magnificencia es el
orgullo de sus ciudadanos.
La música
La evolución de la música medieval puede verse como un
reflejo de ambos estilos arquitectónicos.
El canto gregoriano, con su hierática y serena melodía,
es el producto de una sociedad que estaba convencida de que el hombre vive para
Dios y para la eternidad. Lo mismo puede decirse del románico.
El paralelo del estilo gótico es la polifonía, música a
varias voces que ascienden y descienden dinámicamente, elevándose hacia las
alturas.
La literatura
, En cuanto a la literatura podemos decir que durante
siglos de la Edad Media no hubo producción literaria importante que se conserve
ya que la misma era de origen y difusión orales. Habrá que esperar hasta el siglo XI para que empiecen a tomar forma
escrita las primeras obras medievales que se conservan. Son extensos poemas que narran episodios
bélicos de héroes nacionales que reciben el nombre de epopeyas.
Existen también otro tipo de obras con otros contenidos
que surgieron en las cortes señoriales. Nos referimos a la poesía
trovadoresca que surge en Provenza, al sur de Francia. Los trovadores,
poetas y músicos generalmente nobles, son los que componen los nuevos poemas
líricos que agradan a esta sociedad cortesana y refinada. En tanto los poemas
épicos apuntaban a un público masculino, la poesía trovadoresca se dirige fundamentalmente
a la mujer.
El “dolce stil”
La poesía provenzal o trovadoresca aparece a finales del
siglo XI en Francia. Esta poesía está vinculada directamente con la música, es
escrita para ser cantada. El tipo de público que la escuchaba era un público
culto que conocía las reglas del amor cortes, lo que lo diferencia del juglar
que tocaba en plazas ‘publicas. Los trovadores debían tener una gran formación
y cultura ya que los poemas eran formales, estaban totalmente sujetos a leyes
rítmicas y métricas inviolables. El tema principal era el amor, el amor cortés,
un amor entre la aristocracia, en el que no importaba la moral, ni el
adulterio. La clase alta creía que era la única digna de sentir amor. Dolce
stil novo_ Aparece en contraposición al
amor cortés, la mujer deja de ser un objeto sexual y pasa a ser la donna
angelicatta, o donna ponte, se la consideraba la salvación del hombre, un
puente hacia Dios, el hombre supera los pecados gracias a ella. Se promueve el
amor gentil, el amor puro, un amor independiente de la clase social. Los poetas
del Dolce Still se inspiran en este amor para escribir, la donna angelicata era
su musa inspiradora. El amor pasa a ser un tema filosófico, todo tiene un
sentido más allá del literario.



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